San Diego, Ca.- La política migratoria de contención aplicada en la frontera no ha funcionado, ya que se han deportado a más de 400 mil centroamericanos, incluyendo familias separadas y menores no acompañados, por lo que es una imperiosa necesidad establecer nuevas políticas de gestión migratoria por parte del gobierno federal, señaló Javier Castañeda Pomposo, diputado federal del PES y secretario de la Comisión de Asuntos Migratorios.
Durante su participación en la Primera Conferencia Multidisciplinaria Binacional sobre Migración y Trata de Personas, que trata los efectos traumáticos en la salud mental/ física individual y las comunidades fronterizas, realizada el sábado pasado en San Diego, CA. dijo que México está cambiando su perfil de ser un país expulsor, a una nación receptora de migrantes.
Añadió que diversos factores han contribuido a ello, tales como su situación geográfica que lo convierte en un país de origen, tránsito, destino y retorno, así mismo en razón a los conflictos e inseguridad en Centroamérica aunado al desarrollo económico de México.
La política migratoria de contención aplicada en la frontera ha propiciado una nueva dinámica migratoria, de tal forma que entre enero de 2015 a septiembre de 2018 México deportó a 436 mil 125 guatemaltecos, salvadoreños y hondureños, superando a Estados Unidos que en el mismo periodo, repatrió a 293 mil 813, detalló Castañeda Pomposo.
Mencionó que la migración ha contribuido a mejorar la vida de las personas tanto en los países de origen como en los de destino y ha brindado a millones de personas en todo el mundo la oportunidad de forjarse una vida segura y plena.
Sin embargo, apuntó, no todos los movimientos migratorios se producen en circunstancias favorables, últimamente se ha observado un aumento de los desplazamientos provocados por conflictos, persecuciones y situaciones de degradación.
El legislador federal expuso que históricamente por más de un siglo, México había sido un país primordialmente de emigración, en particular hacia Estados Unidos, pero hoy en día se estima que en ese país viven 11.6 millones de personas de nacionalidad mexicana, más 23 millones de descendientes de mexicanos.
Hoy en día México es el quinto país receptor de migrantes de América con casi el 1% de población migrantes, detrás de Estados Unidos, Canada, Argentina y Venezuela con el 15.3, 21.5, 4.9 y 4.5 por ciento de su población, respectivamente.